No es suerte, es… técnica

No es suerte, es… técnica

Victor Clavijo caracterizado como Philip Lehman – Foto: Sergio Parra
barcopirata.org

La historia de Estados Unidos a pesar de ser corta en términos comparativos tiene un enorme poder de fascinación popular, sobre todo cuando es relatada a través de largas sagas familiares que trasladan, de padres a hijos, los valores tradicionales que esa sociedad ha consagrado como propios: liberalismo, individualismo, éxito o igualdad de oportunidades.

La imagen del emigrante llegando a puerto a mediados del siglo XIX en busca de la tierra prometida es todo un icono cultural y el imaginario colectivo está repleto de apellidos reales o ficticios que a todos nos resultan familiares: KennedyCorleoneO’HaraRockefellerGoldmanCapone… Este poder basado en el clan, ha sido tradicionalmente bien aprovechado por los autores más brillantes del cine y la literatura norteamericana entre los que aparecen nombres como Mario PuzoMartin ScorseseErnest HemingwayOliver StoneJohn Steinbeck… junto a autores teatrales como Miller o Williams, más centrados en el llamado “gran teatro realista” americano de temática profunda y psicológica. Todos ellos contribuyeron más allá de sus fronteras a completar el retrato colectivo de una sociedad hegemónica, como es la estadounidense.

La historia de los Lehman es en gran medida la historia de EE.UU. y también del capitalismo. Emigrantes judíos procedentes de Baviera hacia 1844, construyeron un imperio financiero a base de “encontrar siempre la dama” o -dicho de otro modo- perseguir la mejor forma de ganar dinero con el dinero. Del algodón al café, pasando por los ferrocarriles, el tabaco, la radio, la televisión y la banca, atravesando grandes hitos de la historia norteamericana como la guerra civil, la crisis del 29, dos guerras mundiales y la crisis del petróleo. Así hasta septiembre de 2008, cuando la quiebra de Lehman Brothers propició la crisis financiera global cuyos efectos aún son perceptibles.

Encuentra la dama – Foto: Sergio Parra
barcopirata.org

En ese contexto, nace Lehman Trilogy una obra de Stefano Massini y dirigida por Sergio Peris-Mencheta que lleva de gira casi un año y puede verse estos días en Madrid. La sensación como simple espectador y profano en materia teatral, es la de asistir a un espectáculo en el sentido amplio de la palabra. No sólo en su faceta más técnica y artística, por convertir un argumento en apariencia árido en una colorista explosión de entretenimiento, la cual fluye en armonía gracias a la escenografía, la música y la magnífica interpretación de sus actores. También en su faceta más emocional y ancestral, como arte escénico vivo que logra conectar al público con su tiempo y fomentar una mirada retrospectiva para comprender el presente.

Esa faceta esencial del teatro, es la que hace trascender a Lehman Trilogy como un fenómeno que abre una reflexión acerca de nuestra relación con lo material y el ávido deseo de acumular riqueza y relevancia más allá de nuestra vida. Una visión burlesca y sin rencor de la historia del capitalismo a través de algunos de sus protagonistas, desde sus principios hasta el fracaso del sistema, sin perder el tono de fábula y comedia incluso en un terreno tan delicado como es el papel de los judíos en el relato: Baruch Hasem!

Lehman Trilogy se representa en Madrid (Teatros del Canal) hasta el 21 de julio

Web productora: www.barcopirata.org

2 Replies to “No es suerte, es… técnica”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *